La persuasión y la negociación forman parte esencial del protocolo empresarial, para ello, nos centraremos en una serie de ideas básicas que harán más fácil el desarrollo del proceso.
1. Lo primero es estar convencidos plenamente de aquello sobre lo que tenemos que convencer.
2. Conocer muy bien a la otra parte, ponernos en su lugar y localizar el posible "choque de intereses".
3. Crear un ambiente, un entorno adecuado y cordial en el que no se trate directamente el tema. Daremos un lugar prioritario a la toma de contacto, a la entrega de atenciones especiales, al recibimiento y el agradecimiento de las mismas.
4. Empezar primero por los puntos más factibles en los que sabemos que sí que va a haber acuerdo.
5. El saber escuchar se convierte en un aliado. No se trata solo de oír, sino de comprender lo que se ha oído.
6. Se debe encontrar un punto en el que tras la exposición de ambas partes, la comprensión sea mutua, se produzca ese feedback o realimentación necesaria para que la comunicación sea eficaz.
7. No vencer convenciendo, sino convencerse por uno mismo.
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